Vivimos tiempos de mucho estrés, donde uno de los momentos buscados por muchos consiste sencillamente en disfrutar de tiempo para descansar. Esta es la razón de que cada vez aparezcan más centros de masaje en muchas ciudades, y que se ofrezcan todo tipo de terapias. El origen del término masaje viene del francés “masser” y significa amasar o dar masaje, lo cierto es que, si bien, la palabra ha evolucionado dese entonces, el significado no dista tanto del original. Precisamente es Francia el considerado pionero en la utilización de las terapias manuales en occidente.
Y si en occidente Francia ha sido la principal impulsoras del masaje, desde los países del sureste asiático llega la nueva fiebre de los masajes tailandeses o balineses, muy demandados en todo el mundo.
El Masaje Tailandés triunfa en los Centros de Relajación
Son muchas las cosas que podemos aprender de las culturas del sudeste asiático a través de sus masajes que, por otra parte, llegan en forma de ritual y nos recuerdan la importancia de un buen equilibrio de cuerpo y mente.
De hecho, el masaje tai tiene su origen en los monasterios y en algunos aún se sigue enseñando. Curiosos orígenes para un tipo de masaje que se ha popularizado tanto en los últimos años.
Uno de los lugares más populares es Wat Pho en Bangkok que forma a muchas personas todos los años, transmitiendo la técnica y un envidiable espíritu para servir a través del masaje.
No en muchos sitios el masaje tailandés conserva ese sentido que tenía en sus orígenes, si bien, son muchos los centros que buscan convertir este tipo de masajes en todo un ritual, centros como Evasiom Spa, cuyas terapeutas han sido formadas, precisamente en este templo, así como en la Djamoe School de Bali o la Escuela Internacional de Masaje Balinés de Indonesia, trabajan el cuerpo y las emociones, consiguiendo una experiencia única.
En Evasiom Spa buscan conseguir ese toque milenario de las terapias de masaje orientales, esa magia que llega con el ritual y la posibilidad de experimentar un verdadero momento de auténtica relajación verdaderamente reparador.
Por otra parte, una sesión de masaje conlleva múltiples beneficios para nuestra salud al tiempo que nos relajamos ya que nos permite aumentar la conciencia de nosotros mismos, al silenciar y calmar nuestra mente podemos ver las cosas con más claridad, pues también nos ayuda a concentrarnos.
Además, a través del masaje muchas emociones atrapadas en los tejidos se desbloquean, con lo que nos sentimos más ligeros, incluso tiene efectos antidepresivos y sensibiliza profundamente nuestros sentidos.
No es de extrañar que muchas personas que trabajan en empresas creativas recurran a estas técnicas para superar sus bloqueos creativos.
Y es que, nada mejor que un buen ritual de relajación después de haberle dado mucho al coco para dar con esa idea magnífica que le dará un giro a tu carrera.
Al fin y al cabo, el poder de amasar nuestro cuerpo con aceites esenciales se está convirtiendo en uno de los rituales contemporáneos con más adeptos.