Dicen que la vida es cíclica y que todo acaba regresando. Algunas cosas para bien, como por ejemplo los vinilos, y otros para mal, como por ejemplo, las hombreras. Fuera de bromas, es cierto que en los últimos hay un nuevo boom por el disco vinilo. Las razones son muchas, pero eso lo analizaremos luego. Ahora me gustaría saber si todavía guardas vinilos en tu casa, cuál es tu favorito, y cuánto estarías dispuesto a pagar por uno vinilo muy deseado.
Los datos no mienten. La empresa BuzzAngle calculó hace pocas semanas en un informe que las ventas de estos discos se incrementaron en un 20,1 % durante el pasado año. Algo que no es nuevo, ya que son muchos años en los que va creciendo. Aunque lo cierto es que precisamente debido a su carácter de producto físico, y a las peculiaridades de los sistemas de ventas, no está del todo claro el número de unidades vendidas en todo el mundo.
Las ventas son difíciles de calcular ya que muchos vinilos se venden en ferias del disco y mercadillos. También a través de webs tan conocidas como eBay o incluso en Liquistocks, que es una web de liquidación de stocks donde en más de una ocasión me he encontrado vinilos a un precio increíble. Además, algunos discos son prensados por discográficas muy pequeñas. Por todo esto, las cifras son complicadas, pero viendo foros y chats en la red está claro que el vinilo ha regresado para quedarse.
Cambio de mentalidad
¿Por qué se ha producido este cambio de mentalidad? Pues está claro que tiene que ver con los cambios de consumo de los que aficionados a la música. No hay que negar que seguimos siendo unos nostálgicos, y el componente melancólico es muy grande. Solo hay que pensar que uno de los títulos más vendidos en vinilo sigue siendo el Sgt. Pepper’s Lonely Hearts Club Band de los míticos Beatles. Pero no solo vivimos de melancolía.
Un vinilo es mucho más espectacular gracias a sus carátulas. Se llegaron a realizar, y se realizan, auténticos prodigios en la creación de esa clase de discos, algo que en el minúsculo CD era imposible de pensar. En el mercado, una buena carátula está pagada a precio de oro.
¿Mejor sonido?
Otra de las razones es la inevitable de que su sonido es mucho mejor que el de cualquier soporte digital. En realidad este debate no es del todo cierto, pues sería complicado responder simplemente con un sí o con un no. Ya que entran en juego muchos factores como por ejemplo la calidad del propio vinilo, del artista y por supuesto del CD que vayas a reproducir.
Muchos solistas y grupos de rock y pop modernos también están editando en vinilo sus últimos trabajos. «Songs of Innocence», lo último de U2, que está disponible gratuitamente en descarga digital a través de iTunes. Pero no son los únicos. Daft Punk, Bunbury, Mark Knopfler, Lady Gaga y un largo etc siguen siendo fieles a este formato.
Música independiente
Los músicos independientes saben que hacer discos de vinilo para vender en conciertos es el mejor merchandise que pueden tener, mientras ofreces al mismo tiempo descargas digitales de tu música. La cuestión es saberse adaptar a la situación porque las dos son complementarias y puedes crear paquetes especiales para cada edición, con vinilos de diferentes colores o descargas digitales de canciones secretas incluidas con el vinilo.
No podemos olvidarnos del mantenimiento de estos vinilos. Puede que sea una tarea que requiera su tiempo, pero merece la pena tener como oro en paño estas joyas de la música. No hace falta acudir a la tarea de realizar una limpieza a fondo, basta con no dejar los discos tirados por casa, protegerlos siempre con sus fundas y tapar el tocadiscos para que no coja polvo. Hay que pensar que tenemos obras de arte entre nuestras manos.
Es evidente que los discos de vinilo nos ofrecen una forma diferente de consumir música. Ni mejor, ni peor. Sencillamente, distinta. Por eso tú decides cómo quieres escucharlo. Pero la verdad es que me encanta que los que somos unos nostálgicos podamos vivir una segunda juventud del vinilo. Lo que no sé es cuánto dinero estaría dispuesto a pagar por una reliquia. ¿Tú?