No todos sabemos lo mucho que se puede lograr en beneficio de la estructura de nuestras paredes si la impermeabilizamos, como por ejemplo, así es como se evitan los indeseables problemas de humedad que suelen dañar nuestras fachas y espacios internos, ya que atacan de raíz el problema principal; las filtraciones de agua.
Y es que la humedad es un problema muy común en variedad de superficies. Sean de concreto, mortero o de material poroso, todas son susceptibles a ésta.
Si quieres saber como impermeabilizar de forma correcta los muros internos y externos de tu casa, sigue leyendo, que hemos consultado a los expertos en pintura, barniz e impermeabilización de Pinturas Decolor y en este artículo te contamos todo.
Impermeabilización de paredes externas
¿Qué necesito?
- Una brocha, aunque también podrías usar un rodillo o un pulverizador
- Un impermeabilizante invisible
¿Cómo lo hago?
- En primer lugar, hay que limpiar la superficie de polvo y posibles partículas sueltas pasando un cepillo sobre la misma.
- Luego, con la ayuda de la brocha, aplicamos el impermeabilizante empapando bien toda la pared.
- Esperamos unas 2 horas para que el producto penetre bien en el poro y aplicamos una segunda mano.
- Esperamos 8 horas a que el producto esté totalmente seco y listo.
- Igualmente, si queremos que el producto tenga un acabo de buen gusto estético, podemos aplicar uno que venga mezclado con barniz y que le de un bonito toque satinado a la pared.
Impermeabilización de muros interiores
¿Qué necesito?
- Una brocha, aunque también podrías usar un rodillo o un pulverizador
- Un impermeabilizante invisible
¿Cómo lo hago?
Lo primero es detectar si tu pared ya tiene signos de la presencia de humedad o no, ya que hay que proceder de formas distintas. Así, en los casos en los que queremos prevenir que la humedad aparezca, comenzamos por:
- Antes de pintar asegúrate de hacer una correcta preparación de la superficie.
- Luego, aplica dos capas de algún tratamiento antihumedad, dejando secar cada una de ellas por al menos 12 horas. Incluso, si tienes algunos ladrillos a la vista como parte de tu estilo decorativo, te recomendamos aplicarle el tratamiento también a estos.
Ahora en caso del muro que quieres impermeabilizar ya está algo dañado por los efectos de la humedad, debes hacer otro tratamiento. Si tienes el conocido problemas de hongos por humedad, primero, debes retirar la pintura de la zona dañada, limpiarla con un cepillo como hiciste en los casos anteriores, y entonces, aplicar el tratamiento impermeabilizante.
Errores al impermeabilizar que debes cuidar no cometer
Más allá de saber como impermeabilizar nuestras paredes, queremos saber como hacerlo de la forma más eficiente; y en este caso, esta forma es hacerlo bien. Igualmente, la mejor vía para que tus paredes no sufran el deterioro causado por la humedad, es que la humedad no ingrese en ellas.
Así, lo más recomendable es aplicar los productos impermeabilizantes antes de que aparezca el problema, de forma que nos funcione como medio de prevención; ya que una vez que tenemos el problema frente a nosotros, no existe producto mágico que acabe con ello en minutos, como tanto nos gustaría.
Por eso, es que decimos que lo importante es saber como hacer el proceso de impermeabilización y aplicar el producto. Y es que no creerás que en el mundo de la construcción y las reformas es muy fácil cometer errores. Hay muchos obreros que no saben cómo hacer mezcla de cemento para paredes, o aplicarla de la forma correcta. Asimismo, los que debemos supervisar el trabajo, que somos nosotros los dueños de la casa, no tenemos ni la noción más básica de como se hacen las cosas, de como se deben manipular los productos y de como identificar defectos en los resultados.
Para ayudarte, te hablaremos de los errores más comunes en la impermeabilización de muros para que cuides que no se comentan en tu casa:
1) Mala proporción de la mezcla
Uno de los primeros errores al querer impermeabilizar una pared es una mala utilización de la proporción de la mezcla en la elaboración del impermeabilizante.
Para evitarlo, debemos cuidar utilizar siempre las mismas medidas para todos los elementos con los que vamos a elaborar la mezcla, y por sobre todas las cosas, intentar no hacer las mediciones al ojo.
No importa si usamos las medidas 2:6, 3:9, o 4:12, la proporción debe ser: 1 volumen de cemento + 3 volúmenes de arena.
2) Mal uso de la mezcla
Es importante saber como funciona y como se utiliza la mezcla impermeabilizante. Esta se trata de un aditivo impermeabilizante para concreto, que incorporado en el agua, permite obturar los poros del mortero de cemento, logrando un efecto antihumedad.
El agua así preparada se utiliza para hidratar la mezcla de cemento y arena (1:3). Es muy importante que dicha proporción se respete, por lo que hablamos en el anterior punto sobre las proporciones adecuadas para la mezcla, y porque una mezcla mal preparada puede dar paso a otros problemas.
Colocar el impermeabilizante al final de todo y siguiendo medidas de proporción como una lata cualquiera que se llena y se vacía sin ningún tipo de medida exacta, o peor, a ojo del que prepara la mezcla, lo cual, al final, no es que no se logrará el efecto de antihumedad que tanto se busca, sino que su efectividad distará de la que se promete.
Lo peor de la situación, es que el ojo inexperto del cliente no sabrá reconocer un trabajo mal hecho, sino hasta que la humedad esté atacando sus paredes al pasar el tiempo y ya nada pueda hacerse, eso sin contar, que el dinero invertido en el trabajo se habrá perdido hacia ya mucho tiempo sin posibilidad de reclamo.
3) Aislación Hidrófuga
El revoque impermeable debe tener un espesor mínimo de entre 5 a 8mm para que sea realmente antihumedad. Entonces, un error común que se comete al extender la mezcla aislante, es presionar excesivamente para que quede compacta sobre la pared, ya que esto lo que hace es que pierda espesor; y asimismo, su capacidad para impermeabilizar paredes desaparece.
Lo recomendable es conservar espesores mínimos para evitar futuros problemas de humedad.
4) Aplicar el Impermeabilizante de la forma correcta
Así como puede ser un error intentar presionar excesivamente la mezcla impermeabilizante sobre la pared para que quede compacta, también puede pasar que se ponga muy poca mezcla, creando un cubrimiento muy delgado, por mezquindad o por pura pereza de hacer el trabajo como es, por lo que tampoco estaríamos aprovechando las características antihumedad del producto.
Igualmente, cuando se elabora la mezcla, el agua tiene que estar presente por un período prolongado, ya que es la encargada de favorecer el fraguado, o la reacción química que se produce para endurecer el mortero hidrófugo y darle su característica impermeabilizante. Por lo tanto, si el agua desaparece antes de tiempo, se irá junto con esta propiedad.
Asimismo, si los ladrillos del muro a impermeabilizar no se mojan adecuadamente antes de revocarlos, actuarán como una esponja que absorbe el agua en la mezcla, y por consiguiente, cortando la reacción química que produce su endurecimiento.
Entonces, como dijimos anteriormente, lo que va a suceder es que habremos hecho un trabajo nulo y habremos revestido inadecuadamente la pared, por lo que solo será cuestión de tiempo antes de estar buscando como eliminar la humedad en las paredes.
5) El mal «curado»
Para que entiendas mejor este punto, debeos comenzar por definir a que nos referimos con la palabra “curado”. Este consiste e mantener hidratadas (húmedas) las paredes recién revocadas. Para ello se deberá humedecerlas 3 veces al día, al menos durante 3 a 4 días.
Esto responde a que, como explicamos en el punto anterior, la presencia sostenida del agua es fundamental para producir la reacción química que genera el fraguado de los morteros impermeables.
Igualmente, si el revoque impermeable no se cubre inmediatamente con la próxima capa de revoque grueso, exactamente no más de ½ horas después, lo que puede pasar es que se seque con la acción del viento o la exposición al sol.
Un buen curado del revoque evita que se seque perdiendo su característica antihumedad y generando fisuras o grietas que luego puedan hacer el papel de vías de acceso para la humedad; la cual encontraría un pase libre desde el exterior.
Finalmente, podemos concluir que los principales errores que se deben evitar para una buena impermeabilización de paredes son:
- Mala proporción de la mezcla de cemento y arena
- Mal uso (o falta) del aditivo impermeabilizante
- Colocar una cantidad muy reducida en espesor del producto impermeable
- Mal hidratado (mojado) de las paredes a revocar
- Mal «curado» de los revoques
- Uso de cementos con tendencia a la formación de grietas
Te aseguramos que si cuidas todos estos aspectos, y sigues el paso a paso que te hemos compartido al principio del artículo, dependiendo de la pared que quieras impermeabilizar, lograrás evitar que la humedad se apodere de la salud de tus muros y paredes en casa.